¿Se puede cargar un coche eléctrico con placas solares?

¿Se puede cargar un coche eléctrico con placas solares?


La respuesta es: SÍ, sí es posible cargar un coche eléctrico con placas solares. Si en anteriores posts hemos hablado del buen momento que estaba viviendo el autoconsumo en España, también cada vez son más las familias que deciden ir un paso más allá en el cuidado del Medio Ambiente y apostar por conducir un coche eléctrico.

Por eso, la pregunta no ha tardado en formularse: Si ya dispongo en casa de una instalación fotovoltaica, ¿puedo con esa energía limpia seguir contribuyendo a la sostenibilidad del planeta recargando el coche eléctrico? Sin duda, se trata de una gran alternativa a los combustibles tradicionales que, al igual que está sucediendo en los últimos tiempos con el controvertido precio megawatio/hora de la tarifa de la luz, no dejan de oscilar su precio en el mercado.

Cuestiones a tener en cuenta a la hora de cargar un coche eléctrico con placas solares

Ya hemos apuntado que la idea de combinar ambas circunstancias pueden resultar muy atractivas, sobre todo económicamente hablando. También es una manera de aumentar el rendimiento de la instalación de una vivienda, al darle un uso diferente al que estamos acostumbrados.

No obstante y aunque sea posible, hay que tener en cuenta algunos detalles.

El primero de ellos radica en la tipología de la instalación fotovoltaica. ¿Se trata de una instalación aislada y por tanto funciona de forma independiente a la red eléctrica y que almacena la energía captada en baterías? ¿Es por el contrario una instalación destinada al autoconsumo y también preparada para verter a la red eléctrica el excedente sobrante de su producción para que la empresa comercializadora de la luz en cuestión compense nuestra aportación? Aunque en ambos casos la instalación fotovoltaica está preparada para prestar carga a un coche eléctrico, no es conveniente hacerlo basándonos en una instalación aislada. ¿Por qué? Porque al ser un sistema totalmente independiente de la red eléctrica estaríamos consumiendo la energía almacenada en las baterías, corriendo el riesgo de que nuestro hogar quedara corto de suministro eléctrico si se avecinan días nublados o de invierno, donde no hay tanta potencia solar.

Por otro lado, otra de las ventajas de cargar un coche eléctrico con placas solares conectadas a la red eléctrica es que en ellas se puede instalar un control dinámico de la potencia que permite regular la potencia transformada por las placas solares y la energía de la red contratada para que podamos cargar nuestro vehículo únicamente con el excedente de la energía solar producida por nuestra instalación o bien realizar una carga rápida con la máxima potencia combinando ambas energías: toda la que esté disponible de la instalación fotovoltaica y el mínimo de electricidad de la red eléctrica, por poner un ejemplo.

¿Puedo almacenar energía para cargar un coche eléctrico con placas solares después?

Aunque lo habitual es cargar el coche eléctrico durante el día cuando más horas de luz se generan para que así se puedan consumir en el momento, la respuesta a si yo puedo almacenar energía para cargar un coche eléctrico con placas solares después es: Sí, siempre y cuando tu instalación disponga de baterías en las que poder almacenar la energía para poder usarla posteriormente. Un ejemplo de esta casuística es que podríamos acumular energía durante el día para luego cargar el coche por la noche, al llegar a casa. 

¿Es rentable cargar un coche eléctrico con placas solares?

Para responder a esta pregunta debemos, en primer lugar, fijarnos en el precio por litro del diésel o la gasolina, por ejemplo. Pongamos como referencia 1,30 € por litro de los mencionados combustibles. Si necesitásemos recorrer 100 km, el precio gastado rondaría los 8 €. Si por el contrario cargásemos nuestro coche eléctrico con placas solares, el gasto para recorrer la misma distancia no llegaría a los 2 € (0,10 € kilovatio/hora). Dicho en otras palabras: echarle combustible al vehículo sea del tipo que sea (diésel o gasolina) puede salir hasta el doble de caro. Apreciamos una diferencia notable en ahorro ¿no es cierto?

El tamaño sí importa

No debemos olvidar que la energía que vamos a necesitar para cargar nuestro coche eléctrico proviene de los módulos fotovoltaicos instalados y la producción de éstos depende de multitud de variables.Lo que más influye es el tamaño de la instalación, pero también debemos pensar en la época del año en la que nos encontremos, las condiciones climatológicas de ese momento y la hora del día (la generación de las 9 de la mañana siempre será menor que la de las 12 del mediodía, por ejemplo).

Por otro lado, también tendríamos que tener en cuenta la potencia y horas de carga que necesita nuestro coche eléctrico y la capacidad de sus baterías (no es lo mismo cargar un modelo híbrido enchufable que tienen baterías de entre 10 y 15kW que un eléctrico tipo Tesla con baterías de entre 60 y 100kW).

Una vez puestas sobre la mesa todas las posibilidades y las principales ventajas a la hora de cargar un coche eléctrico con placas solares, desde Dimarsa animamos a cargar tu vehículo con una instalación fotovoltaica y poder así desplazarte de una forma sostenible y más rentable siempre que tengamos en cuenta el momento del día en que carguemos el coche, el tipo de instalación y de la tarifa de luz que tengamos contratada.

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